Llega a salas «No me nombren a mí sola», una obra interdisciplinaria que reimagina el amor entre Gabriela Mistral y Doris Dana

A 80 años del Premio Nobel de Gabriela Mistral, la obra —codirigida por Bhavani Kali y Pascuala Ilabaca— llega a Quilpué, Valparaíso y Santiago con una propuesta que entrelaza danza, música en vivo, poesía y teatro físico. A partir de cartas y textos menos conocidos de la poeta, la pieza imagina las posibilidades de su vínculo con Doris Dana, acercando al público a un imaginario mistraliano diverso, donde Gabriela aparece en lo íntimo, lo político y lo afectivo.

Existe una Gabriela Mistral que no aparece en los textos escolares: la política, la indigenista, la erótica. Una Gabriela que escribió cartas encendidas, que defendió causas incómodas y que vivió amores que la historia oficial decidió omitir. Es esa Gabriela —más compleja, más humana y más libre— la que inspira la obra interdisciplinaria “No me nombren a mi sola. Fantasías para el encuentro de Gabriela y Doris”.

Con una función de estreno con entrada liberada el sábado 13 de diciembre en el Teatro Municipal de Quilpué, seguida de presentaciones el miércoles 17 en el Parque Cultural de Valparaíso y el viernes 26 en el Aula Magna del Liceo Manuel de Salas en Santiago, la obra codirigida por Bhavani Kali (coreógrafa, bailarina y doctorante en Psicología) y Pascuala Ilabaca (cantante, compositora, diplomada en Dirección Teatral y ganadora del Pulsar a Intérprete del año 2025) cuenta con 16 ejecutantes en escena, un equipo que articula música en vivo, danza —en particular los lenguajes del Bharatanatyam y el Kathak—, el trabajo expresivo del abhinaya y teatro físico. Desde ese cruce, la obra revisita a Mistral desde sus zonas menos divulgadas e imagina el amor que vivió junto a Doris Dana puertas adentro.

«Cuando se quieren comunicar fantasías para el encuentro del amor lésbico, el cuerpo solo, la voz sola y la expresión sola, quedan cortas. En ese sentido, esta obra no podría haber sido de otra manera que no fuera interdisciplinaria»,explicaBhavani Kali,y añade: «El «amor público” es una de las preguntas que ronda la obra, y nos la hacemos reflexionando sobre los aspectos que pudieron haber impedido que Doris y Gabriela se amaran públicamente. La obra en sí misma es una invención. Lo que más me gustaría que quedara resonando en quienes tengan oportunidad de ver«No me nombren a mi sola»es la posibilidad, y a esta altura también necesidad, de expandir los márgenes de creación».

El punto de partida de la dramaturgia de «No me nombren a mí sola» son las propias cartas entre Gabriela Mistral y Doris Dana, además de la poesía de Mistral y otros documentos de interés, como cartas que la artista dirigía a la prensa. Como un ejercicio crítico de imaginación artística, la obra propone abrir un espacio para fantasear con los amores que la historia dejó fuera de cuadro y poner en escena la posibilidad de un deseo que, por su época y contexto, no pudo expresarse públicamente.

“Nos interesa difundir la otra poesía de Gabriela Mistral y reivindicar una relación lésbica del siglo pasado que aún no ha sido admitida en la historia oficial. Con esta obra buscamos aportar a imaginarios colectivos que permitan reconocer que también pueden existir personas de la comunidad LGBTQI+ en los grandes personajes de la historia”, señalan las creadoras.

La función de «No me nombren a mí sola. Fantasías para el encuentro de Gabriela y Doris» en Quilpué es gratuita, mientras que la de Valparaíso se realizará bajo el sistema “paga lo que puedas”. En Santiago, la presentación del viernes 26 en el Aula Magna del Liceo Manuel de Salas cuenta con entradas disponibles a través de PortalTickets.