El track, en el que es acompañada por la estadounidense SYM1, finalmente presenta su clip que cuenta con la presencia de intérpretes «vogue» de la escena ballroom, siendo la autoaceptación disidente un tema central de la canción. Además, la oriunda de Valparaíso anuncia fechas en Antofagasta, Santiago, Concepción y un paso por el Festival Rockódromo.
Todo el industrial pop y darwave de Valparaíso se une al hyperpop estadounidense de SYM1, quien acompaña a Alondra Noctvrna en el track, uno de los puntos más aplaudidos del disco que también cuenta con colaboraciones de Fan Lee de Playa Gótica y Javiera Electra.
La canción, que se viene gestando desde el 2021, está directamente influenciada por el retrofuturismo Y2K. «Quise acercarme un poco más a algo bailable y definitivamente menos triste. Me influenció el hyperpop y el eurodance en algunos aspectos», relata la artista sobre la pieza que tomó sonidos que le recordaban al voguing, para terminar en esta mixtura de elementos bailables.
«No fue hasta hace poco, mientras ensayaba la canción con mi banda, que tuve un momento en el que un recuerdo doloroso del pasado me conectó con la letra y le dio un sentido más concreto. Es curioso cómo, a veces, al escribir letras uno se expresa desde el subconsciente. La canción representa retomar el poder de tu identidad y vivir en aceptación, porque la alternativa es dejarse morir en un cadáver viviente de complacencia».
Con la colaboración y el baile como banderas, el video cuenta con la presencia de la comunidad ballroom House of Nakama y Molotov. «Mi gran amigo y colega, Bahía Conejo, me asistió en muchos aspectos para lograr este trabajo. Fueron dos días de rodaje, con mucho apoyo de amigos y colegas que ayudaron a dar con esta idea de mostrar la dualidad de la vida y la muerte como símbolos del espíritu», explica la chilena que también presentó «Hijx de la Máquina 01» bajo el sello estadounidense Freezepop Records, casa discográfica de SYM1.
❝Para mí, la vida representa la pasión, la imperfección, el impulso; y la muerte es la perfección, lo digital, lo controlado por otros y sin agencia propia. Tuve que soltar un poco para representarme algo más caótica y no tan estoica como en mis otros videos❞, agrega respecto a esta novedad que engrosa su universo artístico capaz de conectarla con un mundo interior lúdico, abstracto, crítico y emocional».
Ahora suelta, comparte y va dando cierre a una era con una serie de presentaciones en vivo. La habilidad exquisita que significa el synth del fin del mundo pasará por Santiago, Antofagasta, Concepción, y termina el año en el Festival Rockódromo de Valparaíso, a realizarse entre el 11 y el 15 de diciembre.
«Estoy emocionada por esta gira ahora que el clima está más cálido. Los shows han sido intensos, densos a ratos, pero sin falta de momentos más juguetones y divertidos. Creo que las partes instrumentales y la guitarra en vivo hacen que sea algo único. Para esta vuelta, hemos refinado un poco más este viaje», concluye sobre este catalizador de fuerza y energía que es ver sobre escena a uno de los nombres de la electrónica de vanguardia más pujantes de la zona.