Joyitas para que sumes a tu playlist y pidas más proyectos de mujeres en ese festival al que fuiste el otro día y eran todos hombres.
En 2016 nos encantó con «Agua«, un vibrante homenaje a sus ancestros incluido en su segundo álbum La Papessa. Años después, la compositora originaria de Colombia pero radicada en Canadá sorprendió con Miss Colombia, un disco que celebra y critica a su país natal en 11 piezas que mezclan el pop con ritmos como el porro, la cumbia, el bullerengue, y la tambora. Un menjunje exquisito, lleno de colores, y texturas, que demuestra que lo tradicional puede salir del museo para integrarse a lo nuevo, a las transformaciones, a lo que somos hoy.
En Lviv, Ucrania, Ira y Alona se encontraron y comenzaron a producir, interpretar y estrenar música juntas. Multiinstrumentistas las dos, este dúo cuenta con batería electrónica, teclados, sintetizadores, guitarra y trompeta, creando así una fusión de maravillosos paisajes sonoros electrónicos con un toque acústico. Además de todo, tienen un cómic sobre su historia, sus viajes, sus aventuras. Hermoso.
Entérate más sobre lo que está pasando en Ucrania, de primera mano, en sus redes sociales.
juana ruda
Respondiendo a los nuevos tiempos y con un refrescante ímpetu joven y combativo, la música, productora y DJ porteña Juana Ruda presentó el año pasado un enérgico EP debut de cinco canciones directas y sumamente bailables. Junto a interesantes colaboraciones de M3gan, Indie J y Hadita Cuántica que sin dudas suman puntos al carácter festivo y sincero que atraviesa todo el trabajo, Bailando en el volcán es un perfecto equilibrio entre el dance y la canción, entre la diversión y la protesta, entre la nostalgia y el corazón puesto en el hoy. Un impulso nocturno contagioso y brillante que nos deja con ganas de más.
ampersan
Zindu Cano y Kevin Garvía son Ampersan, banda de México que fusiona música de raíz tradicional y ceremonial con sonidos electrónicos, psicodelia, rock y experimentación varia. Formando parte de una camada de proyectos que adoptaron hace algunos años la dualidad vanguardia-tradición como bandera, Ampersan juega, además de con la robusta mixtura de estilos, con momentos de ejecución semi-purista de estos. En su música podemos hallar momentos de folklore mexicano tradicional y otros en los que parecen una banda de música electrónica que coquetea fuertemente con lo experimental. Eclécticos, híbridos, juguetones y honestos en su propuesta, el proyecto Ampersan explora en profundidad la música del mundo para crear una identidad genuina e hipnótica.
Luego de la salida del maravilloso Telefone (2016), la rapera estadounidense ha enfocado sus energías en esparcir un mensaje anticapitalista a través de su música y sus redes sociales. Sin ganas de vender ya su propio merch, Noname llama a sus seguidores a hacer donaciones al Book Club, una comunidad dedicada a impulsar a los autores de origen africano y a juntar libros para quienes están encarcelados. Entregada a esto, cada tanto Noname suelta algún que otro tema, como la increíble «Rainforest«, un manifiesto contra el capitalismo y en pos del amor y la vulnerabilidad; un poema con aires jazz que nos hace imaginar lo hermoso que sería vivir en un mundo que no requiera del dolor de algunxs para seguir girando.
mora lucay
Proyecto solista de Natalia Vásquez, cantautora chilena que desarrolló con elegancia y brillantez la dramatic pachanga, género algo sufrido pero que tiene la intención precisa de quitar la pena con la posibilidad hermosa del baile. Con su segundo álbum, Bestia (2020), consolidó su sonido incorporando elementos del pop para generar así ambientes más upbeat que comparten reflexiones cotidianas sobre el amor, la amistad y el ser mujer en el siglo XXI.
Formado por Lay Soares, Lio y Machado, Tuyo fusiona organicidad y texturas electrónicas con temas existenciales. Con una estética que atraviesa el folk y va del lo-fi hip hop al synth pop, el trío brasilero crea un sonido potente, capaz de despertar la vulnerabilidad con ligereza. Uno de nuestros descubrimientos favoritos del 2020.
rocío gal
Pronta a estrenar su primer disco de estudio, la compositora argentina ha llamado nuestra atención con sus letras inquietas y reflexivas, las que mezcla con un sonido folktrónico lleno de destellos de su propia colección sonora: sus raíces del litoral, su amplia escucha de Brasil, la herencia oral, las preguntas que arrastra, los géneros que se funden. Rocío Gal nos entrega la música como una posibilidad de recordar y citar todo aquello que nos interpela, y eso nos encanta.
